Insatisfacción laboral: ¿Qué puedes hacer?

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¿Qué es estar satisfecho en el trabajo? ¿Y tener motivación?

La satisfacción laboral ha sido una de las variables que más se ha estudiado en el campo de la actividad laboral pero aún no se ha llegado a un consenso claro en cuanto a su definición.

En lo que se está de acuerdo es en que está relacionada con toda actividad que realiza una persona cuando está motivada, impulsada, dirigida y movilizada desde el punto de vista psicológico, por motivos conscientes o inconscientes. Estos motivos son los mecanismos psicológicos que impulsan y dirigen la actuación.

La motivación y la satisfacción laboral son dos conceptos diferentes. La motivación es el impulso para satisfacer un deseo o meta, y es el eje de la satisfacción laboral. Por otro lado, la satisfacción laboral se refiere a la valoración de lo que experimentamos o vivimos y la satisfacción cuando logramos una meta.

Por decirlo de otra forma, la motivación implica el impulso hacia un resultado mientras que la satisfacción laboral implica resultados ya obtenidos. Un trabajador por tanto puede estar motivado con el trabajo, pero no estar satisfecho, y viceversa.

Determinantes de la satisfacción laboral

Las organizaciones cada vez están más concienciadas sobre lo importante que es que los empleados estén satisfechos tanto con el trabajo como con la organización. Hay empresas que para lograr este objetivo intervienen sobre los aspectos más concretos y tangibles: salario, horario o posibilidades de promoción.

Por otro lado, cada vez se extiende más la idea de gestionar otros aspectos más intangibles como el clima organizacional para lograr empleados satisfechos. Si se observa un buen clima, las conductas de los trabajadores serán más adecuadas tanto para su bienestar propio como para el bienestar de la organización.

Podemos entonces hablar de dos tipos de satisfacción en función de donde pongamos el foco de esta.

  • Satisfacción intrínseca: se relaciona con aspectos como el reconocimiento obtenido por el trabajo, la responsabilidad, la promoción y aspectos relativos al contenido de la tarea. En resumen, lo que deriva de las recompensas internas al propio individuo.
  • Satisfacción extrínseca: la que se origina a partir de factores como la satisfacción con el salario, los recursos, la relación con los compañeros, las oportunidades de promoción o la seguridad en el trabajo.

También se vincula la satisfacción con la organización con aspectos más allá del puesto de trabajo y que también influyen en la salud, como el bienestar psicosocial.

Causas de la insatisfacción laboral

Lo que parece claro es que esta insatisfacción laboral genera un estado de ánimo negativo para los empleados y repercute en su papel laboral dentro de la organización.

La insatisfacción en el trabajo puede deberse a diversas causas:

  • Trabajo repetitivo y monótono que produce aburrimiento.
  • Gran cantidad de trabajo con salario bajo.
  • Síndrome de burnout debido a unos niveles de estrés excesivos.
  • Mucho tiempo en el mismo trabajo, de forma que éste ya no supone un reto.
  • Falta de formación que impide alcanzar puestos superiores.
  • Realizar un trabajo que está por debajo de nuestras habilidades o formación.
  • Clima laboral negativo: mala relación con nuestros compañeros y/o superiores.
  • Muy poco tiempo libre.
  • Ambiente laboral que no tiene en cuenta las necesidades y sugerencias de los empleados.
  • Ambiente laboral autoritario, con gran cantidad de hostilidad.
  • Bajo prestigio y estatus debido al tipo de trabajo realizado.

Diferentes actitudes ante la insatisfacción laboral

A pesar de que muchas personas no se encuentran satisfechas con sus trabajos, permanecen en sus puestos sin hacer ningún tipo de cambio. En algunos casos, esto se debe a un punto de vista pesimista, ya que creen que no van a encontrar nada mejor.

Otras personas, por el contrario, permanecen en su puesto ya que, al fin y al cabo, este les da seguridad. Pero su productividad suele decrecer con el paso del tiempo y la forma que tienen de sobrellevar ese malestar es contando los días que quedan para las vacaciones o para la jubilación.

Para otras personas, el dejar el puesto de trabajo puede suponer un riesgo ya que lo necesitan para mantener a su familia, pagar hipoteca, deudas, etc., por lo que ven obligados a priorizar esa seguridad por encima de la infelicidad que les produce su trabajo.

Consecuencias de la insatisfacción laboral

Cuando el trabajo es una fuente continúa de insatisfacción, cuando se ven mermadas las posibilidades de avance y realización, nos encontramos ante horarios incompatibles con la vida familiar o un trato hostil por parte de compañeros y/o jefes, se puede producir una seria afectación a nivel psicológico.

Esta respuesta negativa o rechazo dependerá, en gran medida, de las condiciones laborales y de la personalidad de cada persona, y se refiere al estado de intranquilidad, de ansiedad o incluso depresivo al que puede llegar una persona que se encuentra insatisfecha laboralmente.

Otra consecuencia de la insatisfacción laboral es la desmotivación o falta de interés por el trabajo, que puede llegar a producir en el trabajador tal apatía, que incumpla con sus funciones de forma habitual.

Además, esta situación, sea por el motivo que sea, puede llegar a producir ansiedad o estrés y, en caso extremo, el trabajador puede llegar a desarrollar una depresión.

La frustración que siente un empleado insatisfecho también puede conducirle a una conducta agresiva, la cual puede manifestarse por sabotaje, difamación o agresión directa.

¿Qué puedo hacer?

En primer lugar, identificar las causas por las cuales estás en esa situación. Una vez hecho esto, comunicarlo a la empresa para intentar alcanzar una solución. Antes de pasar a otras medidas, es positivo hablarlo con la empresa puesto que puede ser que no sepan lo que nos ocurre y puedan entonces buscar soluciones para que dejes de sentirte así y desarrolles todo tu potencial.

Si aun así, tu malestar continúa, hay que plantearse buscar otras alternativas que puedan mejorar tanto tu vida laboral como personal.

Valorando el cambio

Muchas personas no se dan cuenta de que sí que existen opciones y pueden hacer elecciones para cambiar sus carreras. Si creen que no hay más opción que seguir donde están o que no van a poder encontrar nada mejor para ellos, se quedan estancados realizando el mismo trabajo y sin creer que sus vidas podrían ser mejores.

El primer paso para realizar un cambio consiste en:

  • Creer que tengo opciones y que es posible,
  • Ponerme en marcha y analizar las posibilidades, recursos con los que cuento, alternativas,
  • Definir objetivos, qué es lo que quiero, qué es lo que necesito. Ser conscientes de lo que quiero hacer realmente me ayuda a no aceptar el primer trabajo que encuentro.

Por último, recordar que, como hemos visto, la insatisfacción laboral puede afectar al rendimiento de los trabajadores y a la productividad de la empresa, por lo que las empresas u organizaciones deben tratar que sus empleados se encuentren satisfechos profesionalmente procurando que trabajen en un entorno adecuado y con unas condiciones favorables.

¿Y tú? ¿Qué piensas sobre ello? Escríbenos en comentarios, nos encantará conocer tu perspectiva.

 

Artículo escrito por Mónica Bascuñana, psicóloga del HUB 24/7 de Affor Health.

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