¿Te gustaría que tu equipo se sintiese más motivado para trabajar?
¿Te da la sensación de que les falta motivación en su puesto y te gustaría ayudarles?
¿Te preguntas qué hacer y qué podrías modificar para que tu equipo goce de una mayor motivación laboral?
¿Te has dado cuenta de que su motivación está íntimamente ligada a una mayor productividad?
¿Y a un mayor bienestar laboral?
Antes de aportarte estrategias para aumentar la motivación laboral de tu equipo de trabajo, vamos a explicarte de forma detallada este popular concepto.
Qué es la motivación
La motivación, del latín motivus -relativo al movimiento-, hace referencia a aquello que nos incita a la acción.
Ya sea por una necesidad fisiológica (comer, dormir…), o por una necesidad psicológica (sentirnos reconocidos en un grupo, autorrealizados con nuestro trabajo…), lo que está claro es que la motivación nos mueve a actuar de determinada forma cuando se presenta una necesidad.
Haciendo referencia al ciclo motivacional, la motivación se divide en varias etapas. Cuando aparece una necesidad que quiere ser satisfecha, la motivación impulsa a la persona y esta se activa.
De manera que la persona pasa de un estado de equilibrio o homeostasis a un estado de tensión para satisfacer dicha necesidad. Una vez que se descarga ese impulso o tensión y el organismo se pone en marcha, se satisface la necesidad. Y de nuevo, vuelve a su retorno (a su estado de equilibrio).
Destacar que, en el caso de que la necesidad no sea satisfecha, se suelen derivar una serie de reacciones que puede presentar tu equipo (ansiedad, agresividad, comportamiento desorganizado, cambios de humor, nerviosismo, problemas para dormir, molestias digestivas, apatía, desinterés…).
Teniendo esto en consideración, parece relevante que podamos tener en cuenta las necesidades e intereses de las personas de nuestra empresa.
A continuación, te aportamos distintas claves que tendrán como objetivo potenciar la motivación laboral y mejorar el trabajo en equipo.
Cómo potenciar la motivación laboral
1) Informar, establecer objetivos y propósitos
En este punto, sería conveniente realizarse las siguientes preguntas:
¿Cada integrante del equipo está informado de las tareas a realizar y conoce cómo es la mejor manera de ejecutar su tarea?
¿La persona que lidera el equipo ha planteado objetivos claros y medibles?
¿El equipo tiene claro el propósito? O, dicho de otra manera, ¿todas las personas que trabajan en ese proyecto tienen conocimiento sobre el para qué hacen lo que hacen?
Resulta clave mantener a todo el equipo informado sobre el papel que tiene cada uno en la empresa. No hay nada más angustiante para las personas que trabajan para un determinado proyecto que la incertidumbre.
Es importante compartir con el equipo las expectativas, los retos, las oportunidades y amenazas, los campos de acción y las posibles dificultades con las que se podrán enfrentar dentro de la empresa.
En ocasiones es importante explicarles el porqué de su trabajo, pero, en este caso, resulta más importante el PARA QUÉ con el objetivo de promover la motivación laboral.
También es conveniente hacerles conscientes del propósito de su trabajo, pues esto hace que las personas se sientan valoradas, implicadas y que se sientan reconocidas como una parte importante en la empresa.
Encontrar dicho propósito es un punto clave para aumentar su motivación laboral.
2) Conocer y valorar a cada persona de tu equipo
En este caso, nos plantearíamos preguntas como:
En tu empresa, ¿la única conversación del día es para saber qué tal lleváis el trabajo pendiente?
¿Te has planteado que, al igual que tú, todas las demás personas que forman parte del proyecto tienen unas necesidades específicas?
Abre el foco, escucha activamente a tu equipo.
Muestra interés por conocer cuáles son sus necesidades y prioridades vitales.
Sé consciente de estas necesidades y procura satisfacerlas en la medida de lo posible.
El equipo es una piña, sería mucho mejor si nos ayudásemos entre todos.
Por supuesto, no les juzgues ni utilices dicha información en su contra (manipulaciones, chantajes, comentarios despectivos…)
Tampoco cortes sus alas cuando muestran interés por aportar al grupo.
Si infravaloras su curiosidad e iniciativa, inevitablemente influirá sobre su motivación laboral.
3) Dar feedback y valorar su esfuerzo
Con preguntas como:
¿Tu equipo tiene claro cuándo desempeña bien su trabajo y en qué momentos podrían mejorarlo?
¿Sienten que su trabajo es imprescindible para la empresa?
Retroalimenta y considera el trabajo realizado.
Modula aquello que crees que se podría mejorar, pero sobre todo valora su esfuerzo.
Un aspecto importante de una buena persona que lidera, consiste en corregir en privado y felicitar en público.
Si eres el jefe o jefa de equipo, comunícales que el trabajo avanza gracias al esfuerzo que han realizado, y que las tareas que han llevado a cabo han sido imprescindibles para el grupo.
Esto impulsará a los empleados a ejecutar sus tareas de la misma manera o incluso a optimizar su trabajo en un futuro.
Por todo lo que hemos visto en este artículo, se ha hecho evidente la importancia de tener en cuenta las necesidades de todo el equipo y de dar valor a su desempeño para potenciar su motivación laboral.
A lo largo de este texto, te hemos facilitado tres estrategias que te serán muy útiles y que podrás poner en marcha para mejorar la motivación de tu equipo de trabajo.
Porque lo que está claro, es que toda organización está constituida por personas y que éstas deben valorarse desde el primer momento.
Porque no hay organizaciones sin personas, ni personas motivadas si no son valoradas por sus propias organizaciones.
Artículo escrito por Alicia Jiménez, psicóloga del HUB 24/7 de Affor Health.
Convencidos de que las personas son la pieza fundamental de toda organización, nuestro objetivo es cuidar la salud psicosocial de los trabajadores y lograr entornos laborales saludables acompañando a los servicios de prevención en esos procedimientos para mejorar la calidad de vida laboral de los trabajadores y aumentar la eficiencia de las empresas.